Cómo limpiar correctamente las rejas de metal.

Las rejas de metal son muy frecuentes en ventanas y exteriores así como en los cierres de los locales comerciales ya que ejercen una función protectora y son de larga duración.

Efectuar una limpieza correcta, utilizando los productos adecuados, es muy importante para conservarlas en estado óptimo y que el material no se oxide o se dañe. Esto influye en el aspecto visual del enrejado y de la imagen que se proyecta hacia fuera, lo cual es fundamental en el caso de empresas y comercios.

Así, hay al menos cinco consejos a tener en cuenta al momento de limpiar una reja de metal que permitirán quitar la totalidad de la suciedad, evitar el óxido y mantener su color o tonalidad, entre otras.

Utiliza un paño húmedo.

Es el más adecuado para mojar en un cubo de agua y luego pasarlo varias veces por la superficie de la reja bien escurrido, incluso en los extremos más complejos de higienizar para arrastrar el polvo acumulado y posibles manchas.

Ten a mano un cepillo de cerdas duras.

Si la reja acumuló gran cantidad de polvo o de suciedad y no se lava hace mucho tiempo será mejor un cepillo de cerdas duras ya que ayudará a concretar el primer paso que es, justamente, ablandar todo para luego higienizar por completo.

Puedes limpiar la reja solo con agua para evitar que productos químicos más fuertes dañen la pintura o el propio material, pero si hay manchas difíciles de retirar puedes emplear un detergente neutro.

Enjuagar siempre con agua limpia.

Conviene renovar el agua constantemente durante la limpieza, pues de lo contrario, al evaporarse la humedad pueden quedar nuevamente marcas de polvo. Si utilizas detergente asegúrate de que hacer un aclarado final solo con agua. Así protegerás mejor el material.

Dejar secar al aire libre.

Una vez lavadas las rejas o cierres exteriores, puedes terminar con un trapo húmedo para eliminar definitivamente todas las partículas y dejar secar completamente al aire.

Dependiendo del clima, de las condiciones meteorológicas y del propio entorno la frecuencia de limpieza podrá variar. Las lluvias, la exposición a polvo, el sol, son factores que inciden en el mantenimiento de las rejas.

Como has podido comprobar el proceso de limpieza de las rejas exteriores, ya sean de viviendas particulares, empresas o locales comerciales no es difícil, sin embargo, requiere constancia para que siempre estén perfectas y al mismo tiempo alargar su vida útil.