Como limpiar el pegamento del suelo tras retirar una moqueta

La moqueta es un revestimiento de suelos que se emplea para determinados contextos o eventualidades y brinda una mayor seguridad, resistencia y confort. Además, cumple una función decorativa y está muy presente en dormitorios de hogares, en hoteles y en sitios muy concurridos como en salones. También puede encontrarse en despachos y oficinas.

La moqueta es un muy buen aislante térmico y acústico y para cuya limpieza se necesita sólo una aspiradora. Sin embargo, el gran inconveniente surge al momento de retirarla para sustituirla por otra debido a las marcas que deja en el suelo; por ello es muy importante utilizar determinadas herramientas y materiales a fin de lograr una desinstalación correcta e higiénica.

Así, quitar una moqueta ya sea de manera momentánea o definitiva requiere de al menos cinco materiales: guantes para proteger las manos, mascarilla para hacer lo propio con el polvo, espátula para poder retirar la moqueta y cúter para cortarla en tiras.

A su vez, con estos elementos se debe llevar adelante (con paciencia y precisión) una serie de pasos con el objetivo de desinstalar una moqueta y que no se evidencien marcas ni pegamento en el suelo.

1. Retirar los muebles y los rodapiés

Si en el lugar o sitio donde se halla la moqueta hay presencia de muebles, estos deben ser vaciados en su totalidad para, luego, quitar sus rodapiés. En caso contrario, quedarán restos de la moqueta con sus marcas.
En reiteradas ocasiones la moqueta se emplea en, por ejemplo, bibliotecas o librerías que reúnen a una gran cantidad de personas. Allí la presencia de muebles, estantes o escritorios es casi un hecho.

2. Cortar el borde la pared

Lo ideal es siempre comenzar por una esquina para, de esta forma, retirar la cinta adhesiva o el pegamento puesto justamente en los extremos de la moqueta. Una vez realizado eso, hay que ir tirando de la misma siempre con ayuda del cúter, el cual no debe rasgar ni lastimar el suelo que está debajo.
Con esta metodología, la moqueta tiene que ser cortada en tramos con la ayuda de la mencionada espátula, la cual complementa la labor del cúter.

3. Enrollar las partes despegadas

Mientras se presta atención a la precisión y fuerza de corte, cada parte quitada debe ser enrollada. Al mismo tiempo hay que observar que no queden restos de pegamento y, en caso de que hubiera, eliminarlos con la ayuda de un disolvente durante al menos 15 minutos.

4. Barrer y limpiar la zona de la alfombra vieja

Luego de desinstalar de manera completa la moqueta, es indispensable barrer sus restos y, también, limpiar muy bien toda la zona. Así, la misma quedará en impecables condiciones tanto para albergar otra alfombra como para que el suelo luzca despejado y tan brillante como antes.

Eliminar los restos de adhesivo.

En ocasiones, tras la retirada de la moqueta queda gran cantidad de pegamento o restos de la cinta adhesiva en el suelo. Si no se retira correctamente puede dañar el suelo. Puede utilizarse una rasqueta o espátula o un buen disolvente si el suelo es cerámico, pero si el suelo es de madera es muy probable que sea necesario acuchillar y barnizar el mismo para devolverle todo su esplendor.

Lo primero es barrer y limpiar el suelo con agua. Antes puedes utilizar la aspiradora.
A continuación puedes necesitar un decapante químico especial para maderas. Tras su aplicación puedes rascar los restos con cuidado. También pueden retirarse con una pistola de calor o bien puedes colocar toallas o paños con agua hirviendo encima de los restos de adhesivo para que estos se ablanden.

La moqueta es muy útil y práctica para muchos lugares y contextos, aunque es importante conocer en detalle su proceso de desinstalación para no dañar el suelo y permitir que la misma moqueta (o una nueva) pueda ser colocada sin inconvenientes.