Marketing olfativo: la importancia del bueno olor y como tu empresa de limpieza puede ayudarte.
15 junioLimpieza profesional de restaurantes
15 julioAbrillantado de mármol
El mármol es uno de los materiales naturales más utilizados en los suelos y encimeras de hogares, oficinas y portales de comunidades de vecinos. Tiene una gran dureza y estéticamente es muy valorado pero para que el material conserve su brillo y aspecto de nuevo durante más tiempo es necesario seguir una serie de recomendaciones de mantenimiento y limpieza. También es necesario que de forma periódica se realice un proceso de abrillantado del mármol, sobre todo en aquellas zonas de paso donde el material se deteriore más. Cada cuanto pulir el suelo depende por tanto, del tipo de espacio donde está ubicado y el uso que este recibe. También si se tienen en cuenta algunos aspectos que abajo comentaremos para mantener el buen estado del mismo.
Debido a la porosidad de este material es frecuente que el brillo se vaya perdiendo con el tiempo al absorber impurezas y deteriorarse debido al agua que se introduce por los poros. Por ello, es bueno seguir las siguientes recomendaciones que ayudarán a mantener el suelo en perfecto estado durante más tiempo:
- Utiliza protecciones: Tanto si se trata de suelos como de mármol en encimeras u otras superficies es recomendable utilizar protecciones como alfombras en el caso de suelos, o bien posavasos o tablas de cortar en el caso de encimeras de cocina y sobre todo en las zonas más expuestas.
- Las temperaturas extremadamente calientes (ollas, secadores, estufas…) pueden provocar un mayor deterioro en el mármol.
- Limpiar manchas de líquidos lo antes posible: Si se cae algún producto líquido (incluso agua) en tu suelo de mármol te recomendamos que lo seques cuanto antes ya que pueden quedarse marcas debido a la porosidad y absorción del mármol.
Proceso de abrillantado de mármol.
Cuando el mármol está muy deteriorado es posible que antes de abrillantar sea necesario pulir el material. Esto se lleva a cabo con una lija mecanizada que elimina la capa superior del mármol eliminando así deformaciones o desniveles provocados por el deterioro del material. Así se eliminan también otras imperfecciones como grietas, manchas o arañazos. Tras pulir el mármol es necesario limpiar la superficie de forma profunda con agua y un jabón neutro para evitar cualquier tipo de residuo o polvo antes de abrillantar.
A continuación se realiza el abrillantado del mármol propiamente dicho. Consiste en recuperar el aspecto cristalizado y brillante del material. Este proceso consiste en la aplicación de un decapante, que realizará una limpieza aún más profunda del mármol mediante lana de acero o máquina rotativa. Este proceso de decapado será la base del cristalizador o abrillantador.
A continuación se aplica el abrillantador o cristalizador del mármol que es el producto encargado de crear una capa sólida y transparente de producto cristalizado y es lo que provoca el brillo característico del mármol.
Por último se aplica una cera protectora que servirá para que el abrillantado dure más.